Reseña: A dos metros de ti - Rachael Lippincott, Tobias Iaconis & Mikki Daughtry

Rachael Lippincott, Tobias Iaconis & Mikki Daughtry| Nube de tinta | 288 Págs | Juvenil | Tapa blanda | 17'95€ | Comprar aquí |

A Stella Grant le gusta tener el control, a pesar de no poder dominar sus propios pulmones, que la han tenido en el hospital la mayor parte de su vida. Por encima de todo, Stella necesita controlar su espacio para mantenerse alejada de cualquier persona o cosa que pueda transmitirle una infección y poner en peligro su trasplante de pulmón. Dos metros de distancia. Sin excepciones.

En cuanto a Will Newman, lo único que quiere controlar es cómo salir de este hospital. No le importan sus tratamientos, o si hay una nueva medicación en ensayo clínico. Pronto cumplirá dieciocho años y podrá desconectar todas estas máquinas. Desea ir a ver el mundo, no solo sus hospitales.

Will y Stella no pueden acercarse. Solo con que respiren cerca, Will podría provocar que Stella perdiera su puesto en la lista de trasplantes. La única forma de mantenerse con vida es mantenerse alejados. 

Vivir con fibrosis quística significa miles de visitas al hospital, miles de NO. Cuando Stella ingresa en el hospital no se espera encontrarse con Will, un chico totalmente opuesto a ella. Mientras Stella lo ayuda a seguir su tratamiento, él cuenta los días para ser mayor de edad y poder dejar los hospitales atrás. Dos metros de distancia en todo momento no será un impedimento para que ambos empiecen a sentir cosas por el otro... pero, ya sabéis lo que se dice; hay amores que matan...

Había oído hablar maravillas tanto del libro como de la película. Estaba decidida a no verme la película hasta no haberme leído el libro, así que me hice con el libro cuando pude. Mis expectativas estaban por las nubes, por lo que tenía ese miedo de que no se acabaran de cumplir. Por suerte, el libro hizo que las expectativas quedaran reducidas a cenizas.

La trama nos enseña la dura vida de Stella, una adolescente que sufre de fibrosis quísitca y que se pierde su viaje de fin de curso por tener que ingresar en el hospital. No ha sido una lectura fácil, no por el hecho de que se me hiciera pesada, sino porque han habido momentos de frustración extrema.

No es un libro extenso pero durante la historia pasan miles de cosas que hacen que no te puedas separa de sus páginas hasta acabarlo. Yo tardé unos dos o tres días en acabarlo. Capitulo tras capitulo los problemas aumentan y las soluciones no aparecen por lo que llegas a desesperarte. 

Los personajes son sin duda, el punto fuerte del libro. Aclarar primero que todos y cada uno de ellos han ocupado un lugar especial en mi corazón. 

Empezando por Stella, nuestra protagonista. La verdad es que su forma de ser es bastante divertida. Su necesidad de tenerlo todo bajo control y su fortaleza hace que le cojas cariño enseguida. Su pasado no ha sido nada fácil por lo que su forma de ser va muy ligada a ello. 

Por lo que hace a Will, debo decir que ha sido un personaje muy memorable. Estando en las condiciones que está y teniendo su actitud demuestra mucho de como es. Me provoca mucha ternura su manera de ver las cosas y su espíritu de querer vivir y no sobrevivir. He aprendido mucho y también me he reído mucho con él. Los personajes secundarios han tenido papeles muy importantes en la historia, desde Poe, el mejor amigo de Stella, que también sufre de FQ y que me ha resultado de lo más achuchable, hasta Barb, la enfermera que aunque parece la mala, solo quiere el bienestar de los chicos.

El romance entre Stella y Will me ha encantado. Es verdad, que hay cosas que son poco creíbles, como que ella de repente necesite controlar el tratamiento de alguien que ni siquiera conoce o que se enamoren en tan solo un par de semanas. Aun así, el amor entre ellos me ha parecido muy intenso y real. Con esta clase de historias se demuestra lo que realmente es el amor, que no todo se basa en besos y caricias. Y también demuestra que Stella de todo el mundo de quien podía enamorarse, tiene la mala suerte de enamorarse de alguien a quien no puede tocar, y luego creo que yo tengo mala suerte,...

El final ha sido demasiado para mi cuerpo. Yo, que no lloraba, llevo una racha en la que solo hago que llorar con libros. Pero bueno, me ha gustado mucho, aunque me haya hecho sufrir.

En general, A dos metros de ti ha conseguido llegar hasta el fondo de mi corazón y creo que tiene planeado quedarse ahí por un tiempo. Lecturas como esta te hacen valorar las pequeñas cosas del día a día, y la suerte que tenemos de estar sanos, cosa que a veces se nos olvida...