Cassandra Clare | Destino | 464 Págs | Young Adult | Tapa dura | 17'05 € |Comprar aquí | Clary Fray desearía que su vida volviera a la normalidad. Si pudiera dejar atrás el mundo de los cazadores de sombras, tendría más tiempo para Simon, su mejor amigo, que se está convirtiendo en algo más... Pero el mundo subterráneo que acaba de descubrir no está preparado para dejarla ir; en especial ese apuesto y exasperante Jace... Para complicar las cosas, una ola asesinatos sacude la ciudad la ciudad. Clary cree que Valentine está detrás de esas muertes, pero ¿cómo podrá detenerle si Jace parece dispuesto a traicionar todo en lo que cree para ayudar a su padre?
Después de todo lo que paso en Ciudad de Hueso Clary ya no es la misma. Con su madre aún en el hospital sin despertar, un brujo aparece muerto, seguido de una hada, a los que les quitaron toda la sangre. Clary cree que todo eso es obra de su padre, a causa de que tiene la Copa Mortal. Pero la Clave piensa que se trata de los hijos de la noche (Vampiros).
Cuando la Clave manda a Jace a la Ciudad de Hueso, debido a que no les gusta lo sucedido anteriormente. Pero pasa algo terrible Maellartach, la espada mortal, es robada. Una serie de sucesos hace que Clary, Jace, Alec, Izzy, Simon, Magnus y Luke se involucren en el tema y busquen al responsable.
Debido al gran final del libro anterior, no puede esperar a comprarme la siguiente parte de la saga. Aunque tengo que reconocer que esta segunda parte me ha parecido un poco más lenta y pesada. Esperaba que el segundo se encontrara a la altura del primero. Sobre todo a sido el principio del libro lo que ha hecho que el libro se volviera pesado. Pero a lo largo que la historia pasa se va volviendo más interesante.
Los personajes tampoco cambian mucho, aunque Clary me ha decepcionado un poco la he visto muy plana, en los momentos de acción parecía que ella estaba de espectadora.
Jace es el mismo, sus comentarios que hacen que te eches unas risas, sus sentimientos están muy confusos. Y puede que por esa razón lo haya visto más impulsivo esta vez
Simon bueno, ha cambiado mucho desde el primer libro, ahora es un vampiro, y puede que su carácter haya cambiado, ahora podemos ver a un Simon más valiente y seguro puede que sea porque inicia una relación con Clary.
También tenemos a Maya, una nueva loba del clan de Luke, una chica que me gusto mucho. Conocemos al hermano pequeño de los Lightwood, Max, un pequeño que haría lo que fuera por sus hermanos y que siempre esta dispuesto a ayudar, y me enamoro desde que lo conocí. Y Maryse y Robert Lightwood, los padres de Izzy, Alec y Max. Luego esta la Inquisidora (Imogen) la única persona que he odiado con todo mi corazón, una mujer que piensa que siempre tiene razón.
Como en el libro anterior la narración es en tercera persona, lo que nos hace (desde mi punto de vista) disfrutar y entender mejor a los personajes.
La relación de Simon y Clary no me gusto, sinceramente ya me lo esperaba, pero es que yo creo que estos dos personajes no pegan ni con celo.. veía la relación muy falsa.. y muy forzada..
Luego esta el final... un final que puede que deje algo que desear respecto al anterior libro, pero que igualmente hace que quieras leerte el siguiente libro.
Cassandra Clare sabe como hacer los finales abiertos para que tu no quieras dejar de leer esta saga. Aunque no es un libro que enganche, tampoco puedo decir que es un mal libro. Pero esperaba mucho más.
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