Una joven y famosa asesina condenada a muerte es liberada de las minas de sal en donde sirve condena a condición de competir en un torneo en el que se seleccionará al paladín oficial del rey. Se ha tenido que enfrentar a ladrones, asesinos profesionales y guerreros de todo el imperio y no solo ha salido con vida, sino que ha resultado la ganadora del certamen. Ahora Celaena deberá servir al rey durante tres años antes de ganar su libertad. Pero Celaena no puede aceptar sumisamente las macabras ordenes del monarca del Reino de Endovier y deberá poner en riesgo todo aquello que ha aprendido a querer: al atractivo capitán de la guardia y al propio príncipe. Ella es la única esperanza del reino y le tocará definir a qué le debe lealtad y aquello por lo qué esta más dispuesta a luchar.
Posibles spoilers de entregas anteriores
Celaena está cada más cerca de alcanzar su preciada libertad. Tan solo le quedan tres año de servir al rey para poder obtener su objetivo final. Pero no es todo tan sencillo, pues a parte de los grandes misterios que sigue albergando el castillo, Celaena tendrá que lidiar con algo más complicado aún; los sentimientos que empieza a desarrollar hacia el capitán de la guardia real, Chaol.
Me leí la primera entrega de la saga a principios de año y la verdad después de todo lo que sentí y lo que me gustó me sorprende lo mucho que he tardado en continuar la saga.
La trama prosigue poco después de como acabó en el primer libro por lo que no me costó recordar la historia ni los interrogantes que se quedaron sin resolver. En esta entrega hay un nuevo misterio que nos acompaña a lo largo de todo el libro y que, como de costumbre, no se cierra del todo, sino que te deja con una intriga increíble. En ningún momento resulta una lectura pesada o aburrida, todo lo contrario, a cada página que pasa, las cosas parecen más difíciles, por lo que no puedes parar de leer.
Maas, nos vuelve a enseñar que es capaz de crear un universo mágico que no te para de sorprender y en el que harías lo que fuera por vivir allí. La ambientación es realmente espectacular, la manera como describe y explica la autora los lugares, hace que puedas sentirte dentro del castillo o recorriendo las calles de Erilea.
dulces que existen. Prefiere dar felicidad a los demás aunque eso signifique perderla él. Además, hemos descubierto algo muuuuuy interesante de él a lo largo del libro que creo que dará mucho juego en un futuro cercano.
Chaol, no puedo decir que me haya disgustado. Es más, es un personaje que realmente me gusta, sin embargo, hay algunas acciones o respuestas que no me acaban de convencer. Todo y eso, es un personaje con el que disfruto y del que nunca me cansaré de leer. Espero con ansias su evolución y reacción después de su descubrimiento al final del libro.
Por último, resaltar a Nehemia, a quien he amado con todo mi corazón.
En el tema amoríos, debo reconocer que no era team Chaol y realmente sigo sin serlo al cien por cien, ya que mi amor irá siempre hacia team Dorian. Pero, admito que no me han disgustado tanto como creía, han habido ocasiones, en las que realmente he disfrutado con la nueva pareja que la autora ha formado.
El final ha hecho que casi me explote la cabeza. Un giro tras otro es lo único que encontramos en las últimas doscientas página. Todo parece irse al garete y de repente se soluciona, pero vuelven los problemas, y así sucesivamente. Mi corazón no podía soportar tal tensión y casi estalla. Esa intriga con la que Maas nos ha dejado, debería ser denunciable, tengo, no, ¡¡necesito saber que es lo que pasa!!
En definitiva, aunque normalmente las segundas partes son las más flojas, en Corona de medianoche lo único que hace es mejorar, por lo que no me puedo ni imaginar lo que me espera en los siguientes libros. Sin duda, esta saga está repleta de misterio, amor y muuuucha magia...
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