Reseña: Prohibido - Tabitha Suzuma

Tabitha Suzuma | Oz | 375Págs | Romántica | Tapa blanda | 17'00 € | Comprar aquí |

Lochan y Maya siempre se han sentido más amigos que hermanos. Ante la incapacidad de cuidarlos de su madre alcohólica y la ausencia de un padre que los abandonó, los dos jóvenes deben hacerse cargo de sus tres hermanos menores y esconder su situación a los servicios sociales , porque ninguno de los dos es mayor de edad. La responsabilidad que comparten y las dificultades a las que se enfrentan les unen, hasta empujarlos a enamorarse. Ambo saben que su relación está mal y que no debe continuar, pero al mismo tiempo no pueden controlar sus emociones y la atracción que los domina.

Maya y Lochan, hermanos, amigos, mejores amigos, compañeros de vida. Desde un primer momento conectaron. A temprana edad tuvieron que hacerse cargo de su pequeña familia; con un padre ausente y una madre que se olvida en ocasiones que tiene familia han tenido que cuidar del rebelde adolescente Kit, el revoltoso Tiffin y la pequeña Willa. El problema  es que, entre ambos, siempre se han visto como amigos y no como hermanos, y esto puede traer problemas porque... ¿puede haber amor romántico entre hermanos?

Este fue uno de los primeros libros que leí y recuerdo que me encantó y me abrió mucho los ojos.
La trama no es lenta y aunque la acción llegue poco antes de la mitad, creo que la introducción al estilo de vida de ambos protagonistas es necesario para entender toda su relación mucho mejor. Suzuma tiene una pluma muy fina que me ha llamado especialmente la atención en esta relectura, desde que leí este libro no he vuelto a leer nada más de ella y la verdad es que no me importaría. 
La narración se intercala capítulo a capítulo entre Maya y Lochan, lo que me ha encantado ya que nos permite conocer mejor a ambos protagonistas y poder experimentar y conocer sus sensaciones y pensamientos en todo momento. No es un libro muy largo pero si es muuuuy intenso.

Los personajes son los principales culpables de mi enamoramiento con el libro. Lochan es la persona más sensible, buena y con el corazón más grande que alguna vez he conocido. Él es la demostración de que por muchos badboys que hayan en los libros, los que de verdad llegan a conquistarte y nunca abandonan tu corazón son chicos como él. La autora nos presenta un chico con pánico a hablar con los demás, algo poco común, sobretodo a estos niveles, cosa que hace que empatices con él enseguida. El afán de que todos sus hermanos estén bien, anteponiéndolos antes de sus propias necesidad demuestran la clase de persona que es...
Maya por su parte también ha sabido conquistarme. Una chica sencilla y carismática que a pesar de todo quiere a sus hermanos por encima de cualquier cosa. Vemos como a lo largo de la novela va evolucionando. Me parece que al igual que Lochan, ella también ha tenido que cargar con un peso muy grande a pesar de su corta edad y lo mejor de ella es que aún así, siempre conserva una sonrisa para sus hermanos.
Sus hermanos menores están poco desarrollados en los libros, aunque si que podemos calar sus personalidades enseguida. Kit, aunque lo haya querido matar en muuuchas ocasiones, es el típico pre-adolescente que quiere tener la imagen de chico malo para ser popular entre sus amigos, a pesar de todo eso, podemos ver como solo quiere ser aceptado y tratado igual que los demás. Tiffin es un niño muy simpaticón que solo quiere jugar con sus amigos y Willa es una pequeña princesa que tiene gran admiración por todos sus hermanos mayores, sobretodo por Maya.


El romance se desarrolla de manera lenta y segura. Los personajes van conociendo poco a poco sus sentimientos hacia el otro y tienen que pasar por distintas fases para saber si lo que sienten es real o algo fruto de la situación en la que viven. Tal y como te lo pintan, entre ellos, nunca ha habido una relación de hermanos, sino de amigos. Podemos ver como han adoptado el rol de mama y papa y eso hace que los sentimientos sean inevitables. No creo que me corresponda decir si esto es ético y ni siquiera si está bien o no. Aquí cada uno tiene sus motivos y razones para hacer lo que hace,y no podemos ignorar los sentimientos que vienen del corazón. Aún así, diré que ha sido uno de los romances más reales y bonitos que he leído y  desde mi punto de vista, he olvidado esa relación de fraternidad que los une.
El final, tanto la primera vez que lo leí como esta segunda vez, me ha impresionado. Creo que es uno de esos finales que siempre van a estar presentes en mi memoria porque impresiona y te deja toda la noche dándole vueltas al asunto. 

Puedo afirmar que, aunque lo recordaba de una manera algo distinta, el libro se ha colado en mi corazón por segunda vez. La historia de amor se sale de las "normas sociales" y rompe con todos los estereotipos y aún así marca a todas y cada una de las personas que deciden aventurarse entre sus páginas...